Nací en las Marismas Pontinas, en el centro de Italia (no lejos de Roma), pero con raíces nórdicas: nórdicas por ascendencia y del sur de Italia por necesidad. En resumen, un crisol de culturas. Al fin y al cabo, como toda la gente de Latina, donde vivo.

Conocer los lugares para comprender a la gente y sus historias… conocer a la gente y sus historias para comprender los lugares. Esta es mi manera de ser: usar el dibujo y la acuarela para representar o interpretar los lugares. Así, el dibujo se convierte en una oportunidad para hablar de historias vinculadas a los lugares representados, o a los momentos y emociones que esas imágenes despiertan o que se han vivido.

Es por ello que la técnica de la acuarela se entrelaza a menudo con soportes inusuales, como fondos de pasta acrílica, el uso de bolígrafos de tinta para reforzar o enfatizar los contrastes de luces y sombras, o collages de hojas de periódico para crear cielos casi surrealistas.

Así pues, cualquier situación de belleza en el paisaje o en los lugares —o de fealdad y decadencia urbana— merece la atención de un momento dedicado a fijarlas en el papel, para que hablen a quienes las miran y digan lo que hay detrás de la simple apariencia”.